Retrato de Gareth "El Bárbaro"
Gareth Wyclif, también conocido como Gareth "El Bárbaro", es una figura legendaria dentro de los Primeros Hombres, así como el fundador de la Casa Wyclif hace 8000 años. Construyó el castillo conocido como Darkhold, desde el cual comenzó junto con los guerreros a su cargo la conquista del Norte, que finalizó con la unificación de las demás casas y clanes salvajes de la región, convirtiéndose Gareth el primer Rey del Norte.
Se sabe que uno de los motivos de la conquista del Norte fue la inminente llegada de los Caminantes Blancos, a quienes derrotó con una espada forjada por el mismo, Noche, la cual pasaría a ser el arma ancestral de su casa. La victoria contra estas criaturas se concretó con la construcción del muro de hielo.
Hoy en día, muchas son las canciones y leyendas que los poetas cuentan sobre Gareth, las cuales mantienen viva la imagen de este gran guerrero y conquistador.
Biografía[]
Primeros años[]
Se sabe que Gareth nació en el continente de Westeros hace aproximadamente 8000 años, dentro de lo que hoy en día se distingue como la Casa Wyclif, una de las familias que vivían en la región conocida como el Norte. Perteneció a la etnia de los Primeros Hombres, y su religión fue la de los Antiguos Dioses del Bosque.
Según cuentan las historias, desde pequeño mostró grandes cualidades para el combate, y su particular estilo agresivo lo dotó del epíteto de "El Bárbaro".
En algún momento de su adolescencia, se enfrentó a una pantera negra en una montaña helada mientras realizaba un entrenamiento. Sin embargo, al quedarse asombrado con aquel animal, decidió no matarlo y domesticarlo, pasando a ser su mascota y compañero, mejor conocido con el nombre de Ragyd.
En dicha época, las casas y clanes salvajes se encontraban en constante guerra por el control de la región. A su vez, la amenaza cada vez más inminente de los Caminantes Blancos, criaturas de hielo humanoides que convertían a los guerreros caídos en soldados reanimados, constituía un contexto caótico del que nadie daba cuenta, debido a que le atribuían más importancia al control del Norte.
Gareth, consciente de la situación en la que, no solo el Norte, sino todo el continente, se encontraba, decidió poner fin a los enfrentamientos unificando a todos los habitantes de la región en un solo reino.
Construcción de Darkhold y conquista del Norte[]
Darkhold una vez construido
El primer paso para la conquista del Norte, fue la construcción de un castillo que sirviera como asentamiento para Gareth, su familia y ejército. Esta no se hizo esperar, pues la fortaleza fue edificada en treinta días y treinta noches, la cual una vez culminada, fue bautizada con el nombre de Darkhold. Desde allí, Gareth pretendía gobernar la región una vez esté unificada.
Luego de esto, El Bárbaro se dispuso a reclutar gente para sus tropas. En un principio, pensaba hacerlo de forma pacífica, persuadiendo a los clanes salvajes de la región de unirse a su causa, dando cuenta de la amenaza de los Caminantes Blancos y qué es lo que pasaría en caso de no estar unidos. Algunos clanes se aliaron a la Casa Wyclif, mas otros, por el orgullo de no ser gobernados por nadie, opusieron resistencia, siendo masacrados por el ejército de Gareth.
Una vez formó una milicia considerable, El Bárbaro emprendió su campaña de conquista hacia los grandes clanes y casas nobles. Dicha empresa duró cinco largos años, siendo una operación sangrienta y fastidiosa, culminando con la coronación de Gareth como el primer Rey del Norte.
Primer enfrentamiento con los Caminantes Blancos[]
La causa de Gareth había sido lograda con éxito, no obstante, el período que esta duró no detuvo el avance de los Caminantes Blancos, quienes ya habían conseguido destruir un tercio de la región.
Ejército de los Caminantes Blancos
Esto preocupaba a Gareth, pues si no tomaba cartas en el asunto, el paso de las criaturas no se detendría y aniquilaría todo el continente. Así, fue como, frente a las puertas de Darkhold, El Bárbaro convocó el mayor ejército jamás visto en Westeros, el cual, bajo su mando, partió a la batalla.
Una vez las tropas de ambos bandos se vieron las caras, comenzó la brutal contienda que se extendió durante una semana. Los hombres de Gareth lucharon con gran valor, pero no pudieron hacer frente a los soldados de los Caminantes Blancos, que iban aumentando en número cada vez que caían los guerreros de El Bárbaro. Por tanto, viendo su ejército reducido a la mitad, el Wyclif decidió retirarse para no perder completamente la guerra.
Forjamiento de Noche y victoria[]
Derrotado, Gareth volvió a Darkhold, con la esperanza de idear un nuevo plan con el que poder vencer a los Caminantes Blancos. Buscando soluciones, oyó de un viajero de la existencia de un material conocido como acero valyrio, el cual poseía cualidades especiales. Sin embargo, para crear este material, se precisaba del aliento de un dragón.
Dragón de hielo al cual se enfrentó Gareth
Según las leyendas, al norte de la región, en el límite con el mar, existía un dragón cuyo aliento era capaz de congelar todo lo que tocara, asesinando al instante a sus víctimas. Sin pensarlo, Gareth juntó a sus hombres más capacitados, tomó un barco, y emprendió un viaje para encontrar tal criatura. El viaje duró un mes, y una vez llegados al destino, el monstruo atacó sin piedad. No obstante, luego de una ardua batalla, se logró vencerlo y utilizando su aliento, El Bárbaro forjó una espada a la cual nombró como "Noche", debido a su color.
Ya con su arma, Gareth volvió a Darkhold. Reunió nuevamente a sus tropas, y partió nuevamente al enfrentamiento, esta vez con el ideal de victoria fijo en su mente. La batalla fue cruel y violenta. El plan de Gareth consistía en hacer retroceder lo máximo posible el avance de los Caminantes Blancos, para que luego poder huir en barcos, y construir una fortaleza capaz de retenerlos allí. Mas, la tarea no fue fácil: como ocurrió anteriormente, las tropas enemigas se hacían más grandes cada vez que un solado Wyclif caía. Pero El Bárbaro no se rendiría, y con su arma, demostró que los Caminantes Blancos podían morir, asesinando a varios de ellos, lo cual devolvió la fe a sus soldados, quienes lucharon valientemente.
El enfrentamiento duró varias semanas, aunque al final, Gareth logró su cometido, huyendo por las costas en barcos traídos desde Darkhold. Sin embargo, pagó un precio demasiado grande: tres cuartos de sus hombres, y su leal compañero, Ragyd, cayeron en batalla. Una vez arribado en la capital, se procedió a la construcción de una estructura que sirviera como contención para el avance de las criaturas, la cual con ayuda de gigantes y magia, fue levantada en dos meses, siendo conocida como El Muro. Esta construcción, marcó la victoria definitiva de Gareth sobre los Caminantes Blancos.
Años posteriores[]
Una vez cumplido su objetivo, Gareth se asentó finalmente en Darkhold, desde donde gobernaría la región. Su avance militar prosiguió durante unos años más, parando en el área conocida como El Cuello, debido a la hostilidad de la misma; además, para El Bárbaro, su mayor meta estaba realizada, por lo que seguir conquistando tierras era innecesario.
En años posteriores, Gareth recibió en su castillo a un viajero de nombre Shin, quien maravillaría al Wyclif con sus proezas en Westeros y otros continentes. Así, surgió una gran amistad entre ambos. Cuando llegó el momento de partir para Shin, Gareth obsequió a su amigo un perro guía de la raza Husky Siberiano, quien utilizó dicho animal como el emblema de su casa como muestra de agradecimiento.
El Norte viviría una época de paz y prosperidad, en la que Gareth se casaría y dejaría descendencia, inculcándole valores como la lealtad, el coraje y el honor. Además, les daría un consejo, el cual pasaría a ser el lema de su casa: "Teme a la noche".
Avanzado el tiempo, Gareth asistió al funeral de su amigo y aliado, el gran Shin Edgewood de Ulthos, a quien visitó varias veces en su templo sagrado. La vida de Gareth concluyó a los noventa y cinco años, y su cuerpo fue enterrado en las criptas subterráneas de Darkhold.